Tras la denuncia hecha por un relevo de La Alameda y luego de dos meses de investigación, la Policía Metropolitana, a través de su División de Delitos y Crimen Organizado, rescató la semana pasada a 56 personas. Estaban en situación de explotación laboral y sexual en tres talleres clandestinos (Lavalle 266, Paso 400 y Pueyrredón 600) y dos prostíbulos (Valentín Gómez 2600 y Pueyrredón 200). Los cinco están clausurados.

El juez federal Rodolfo Canicoba Corral y el fiscal Ramiro González ordenaron los allanamientos. En consecuencia, la policía detuvo a cinco personas, pero al poco tiempo quedaron libres, informa un texto de Martín Angulo (Infobae).

El fiscal González ordenó tareas de inteligencia sobre los 25 lugares denunciados para constatar la información. Tras dos meses de investigación, el fiscal solicitó 16 allanamientos en tres edificios donde funcionaban cinco talleres clandestinos (Lavalle 266, Paso 400 y Pueyrredón 600) y en otros dos donde había dos prostíbulos (Valentín Gómez 2600 y Pueyrredón 200).

Los procedimientos fueron realizados el miércoles pasado y en los talleres clandestinos fueron rescatadas 46 personas, todos hombres y en su mayoría de nacionalidad boliviana, y se secuestraron 47 maquinas de coser, telas e insumos.

De los prostíbulos se rescató a 10 mujeres, todas de nacionalidad argentina. Las víctimas fueron entrevistadas por personal de la Oficina de Rescate y Acompañamiento del Ministerio de Justicia de la Nación pero ninguna de ellas aceptó ingresar al programa.

En el edificio de Lavalle se detectó que en los cuatro primeros pisos funcionaban talleres clandestinos que fueron clausurados, al igual que el que funcionaba en el edificio de la calle Paso. En el primer piso existía una situación de "extrema peligrosidad" por un posible derrumbe.

J.C.