Ayer pudieron reabrir los centros comerciales, entre ellos el Abasto de Buenos Aires, recibiendo al público de modo controlado y con medidas de cuidado.
El shopping Abasto abre sus puertas en el horario de 12 a 20 horas, incluyendo estacionamientos, mientras los locales gastronómicos permanecen hasta las 23 aunque sin patio de comida, solo envío o retiro.
Se aplicarán medidas de seguridad sanitarias que siguen un protocolo estricto. Entre otras cosas se toma de temperatura al ingreso mientras hay un control de visitantes por cámara. El uso del barbijo es obligatorio y hay alcohol en todos los espacios comunes, además de alfombras sanitarias, indicación del sentido de circulación interna y cartelería para indicar el número máximo de clientes en cada local. Hay limpieza y desinfección permanentes en áreas comunes.
Permanecen cerrados los puestos para hacer documentos.
Mientras que gran parte de los comercios que subsistieron reabren, incluyendo los cines que reabrirán el viernes 18 de junio con un máximo de 30% de butacas. Mientras el Museo de los Niños anuncia que permanece cerrado “hasta nuevo aviso”. Esperemos que no corra la misma suerte que el cine de Caballito, Cinépolis, de Rivadavia casi Acoyte que entre la pandemia y alquileres decidieron cerrar.
La reapertura se logró gracias a la presión que hicieron desde las cámaras que aglutinan los shoppings ante el Gobierno de la Ciudad antes del Día del Padre como pedían. Ojalá los espacios que brindan salud alternativa, como los gimnasios, clubes y espacios de artes marciales y yoga, tuvieran el mismo poder de lobby para que también puedan volver a trabajar de modo presencial siguiendo el protocolo que dicte la autoridad correspondiente.
R.S.
