El Gobierno porteño comunicó que habrá flexibilizaciones en los cuidados sanitarios para iniciar el ciclo lectivo 2022 en la CABA.
Estas son las cinco claves de las modificaciones con respecto a 2021:
1. No regirá el pase sanitario en ninguna escuela.
2. Fin del sistema de burbujas: se elimina el sistema de burbujas por aula que se utilizó hasta diciembre del año pasado. La dinámica escolar regresará a la normalidad y todos los espacios de interacción de los chicos serán libres.
3. Cada día cuenta: se elimina el aislamiento por contacto estrecho para minimizar la pérdida de días de clases presenciales. Frente a un caso positivo, se le dará avisó a las familias para que puedan advertir rápidamente en caso de que un alumno presente síntomas compatibles con el COVID-19.
4. Recomendaciones de cuidado: los protocolos se adaptarán a esta nueva etapa de la pandemia y se transformarán en recomendaciones. Dejará de ser obligatoria la demarcación del sentido de circulación en los pasillos; el ingreso escalonado al inicio de la jornada; las burbujas en los recreos; los turnos en el comedor; etc.
5. Uso de tapaboca: continuará de la misma manera que el año pasado. No será obligatorio para los chicos de hasta 3° grado inclusive, con el fin de favorecer el aprendizaje en una etapa clave de la comprensión lectora. A partir de 4° grado su uso será obligatorio dentro del aula. En el caso de las actividades al aire libre, su uso no es obligatorio para todos los niveles.
El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, dijo este lunes: “Necesitamos que las escuelas vayan volviendo a la normalidad. Los alumnos necesitan tener rutinas estables, pero sobre todo necesitan un contacto normal y fluido con los docentes y compañeros”.
“Ninguna escuela va a exigir el pase sanitario. Ampliamos los centros de vacunación para que cada familia, junto a su médico pediatra, decida con libertad en qué momento vacunar a sus hijos. Vamos a eliminar el sistema de burbujas. Hasta diciembre, cada aula funcionaba como una burbuja que no tenía contacto con las demás. Ahora eso vuelve a la normalidad y todos los espacios de interacción de los chicos van a ser libres”.
“Al eliminar las burbujas, también se elimina el aislamiento por contacto estrecho. Antes, frente a un caso positivo, toda la burbuja quedaba sin ir a la escuela. Ahora, frente a un caso positivo, se tiene que aislar el chico o el adulto que dio positivo y dar aviso a las familias para que, junto con el personal de la escuela, puedan estar atentos a si alguno de los otros chicos presenta síntomas, pero nadie va a perder días de clases”, explicó.
J.C.
Foto: GCBA