Los responsables del programa Abasto Barrio Cultural (Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires), junto al Área de Antropología Urbana del GCBA, informaron que en breve iniciará una obra pública para poner en valor la calle Agüero, entre Perón y Zelaya, la cual incluirá el ensanchamiento de veredas, la colocación de áreas parquizadas, la realización de seis murales y la colocación de un poema en forma de luminaria colgante hecho por el vecino y poeta Fernando Noy entre Corrientes y Perón.
Según fuentes oficiales, durante una reunión en la Biblioteca del Parque de la Estación, esperan culminar las obras en verano. De hecho, por año se hacen tres Fiestas Abasto, con la calle Agüero como columna vertebral, donde hay espectáculos y feria gastronómica: en invierno, primavera y verano. Para la fiesta de esta primavera la actividad se mudará en torno a Agüero y Zelaya. Esperan que para la fiesta de verano se inauguren las obras.
Abasto Barrio Cultural inició sus actividades a fines de 2020. Incluyó convocatorias, festivales y festejos al aire libre. También hubo encuentros con vecinos y fuerzas vivas para mapear patrimonio y problemáticas locales.
De esos encuentros surgieron ideas para mejorar el espacio público del Abasto. Hubo señalamientos sobre distintos corredores como Agüero, Jean Jaurés, sobre todo en torno a las vías del tren Sarmiento.
Luego de analizar las ideas vecinales, se definió intervenir Agüero, sobre todo para generar una unión entre el edificio del Antiguo Mercado de Abasto (Corrientes y Agüero) y el Parque de la Estación (Perón y Agüero), dos puntos de encuentro ciudadano, social y cultural de la zona. Se tomó esta decisión también por la gran cantidad de teatros y centros culturales que hay en este eje.
“Pese a que solo son tres cuadras, uno siente que hay mucha distancia entre ambos lugares”, hizo notar Emiliano Michelena, referente del programa Abasto Barrio Cultural y del Ministerio de Cultura porteño.
“Va a haber ensanchamiento de veredas e incorporación de verde, vamos a reparar los solados. Vamos a reforzar toda la iluminación peatonal. Trabajamos con la incorporación de arte público, que es algo que fue pedido muchas veces”, añadió.
La intervención se extenderá a lo largo de siete cuadras entre Zelaya y Perón. Se ensancharán las veredas y se colocarán unos 450 metros cuadrados de áreas parquizadas. Si bien se disminuirá la circulación vehicular, los autos podrán desplazarse y se respetarán los espacios de los garages. También se repararán unos 1.600 metros con respecto a solados.
Ejemplo de Valentín Gómez y Agüero:
Se hará la adecuación lumínica de unas 40 farolas. También se colocará una pantalla peatonal en la esquina de Agüero y Corrientes para difundir actividades de Abasto Barrio Cultural.
Del mismo modo, se proyectan mejoras en la iluminación de Sarmiento, entre Agüero y Jean Jaurés; Valentín Gómez, entre Agüero y Gallo; Guardia Vieja, entre Agüero y Gallo; Humahuaca, entre Bustamante y Agüero.
A esto hay que sumar una serie de seis murales que se harán sobre frentes de inmuebles como el mayorista Vital (Sarmiento, entre Agüero y Gallo) o el complejo deportivo Open Gallo (su ingreso es por Gallo, pero tiene muros hacia Valentín Gómez y hacia Agüero).
Los murales tendrán que ver con la identidad del barrio, por eso se harán jornadas con vecinos y estudiantes para terminar de definir sus diseños.
Según uno de los renders (imágenes digitales de muestra) en la pared del Vital en Sarmiento y Agüero se harán un mural de grandes dimensiones sobre Luis Alberto Spinetta, inspirado en uno que fue hecho en el 2020 en homenaje al Flaco.
Por otra parte, la poesía de Noy se extenderá a lo largo de tres cuadras, desde Corrientes hacia el Parque de la Estación.
El poeta estuvo presente durante el anuncio en la Biblioteca del Parque de la Estación y manifestó: “Es un honor, agradezco a todos. Me conmueve”.
“En el Abasto yo tengo raíces tangueras, mi abuelo era el Noy del Abasto que menciona Borges y Cadícamo. De chiquito venía con mi papá porque mi tío tenía un puesto en el Abasto. Me maravillaban los puestos de miles de flores, al lado de las reses. Yo jugaba a esconderme por ahí. Yo viví como 30 años en el Abasto, en unas oficinas sobre Agüero. Con Batato Barea, que también vivía en el barrio, en los ochentas íbamos a trabajar a Babilonia (lo que hoy es Uniclub) cuando cerró el Parakultural”, resumió sobre algunos hitos de su vida.
“El Abasto tiene una enorme y diversa trayectoria”, enfatizó al mencionar algunos cambios en la zona y destacar su potencial en todos los tiempos.
Sobre la obra lumínica: “Este es un poema del Abasto, que surge para sí mismo. Menciona a Carlos Gardel, a Luca Prodan, a Batato Barea”.
J.C.
Foto: GCBA
