La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó un proyecto presentado por la legisladora porteña Gimena Villafruela (Vamos por más) y declaró “de Interés Cultural de la CABA las actividades desarrolladas por la “Asociación Genovesa Argentina Carboneros Unidos”, por su aporte a la difusión de la hermandad Ítalo-Argentina y Genovesa-Porteña”. La institución se ubica en Venezuela 2931, barrio de Balvanera.
El texto también lleva las firmas de Edgardo Alifraco, Jessica Barreto, María Luisa González Estevarena, Francisco Loupias y Sandra Rey.
La defensa del homenaje menciona que esta institución “tiene sus orígenes a principios del siglo XX, cuando Buenos Aires era una ciudad en pleno auge”: “Este desarrollo fue impulsado por una intensa inmigración proveniente de diversos países, especialmente de Italia y España, así como por la relevancia de un sector esencial en aquel tiempo tanto para los comercios como para los hogares: las carbonerías. La mayoría de estas carbonerías estaban en manos de italianos provenientes de Liguria, aunque no exclusivamente. Por esta razón, el 10 de marzo de 1901, se fundó con el nombre de “Sociedad Cosmopolita Carboneros Unidos” con los siguientes objetivos principales establecidos en su estatuto1 : fomentar la amistad y el interés común entre todos los miembros del gremio de carboneros, defender los derechos del gremio y brindar protección a los socios ante dificultades en sus negocios o problemas de salud”.
Cinco años después de la fundación de la Sociedad Cosmopolita, en la Asamblea General, celebrada el 18 de marzo de 1906, se acordó formar una cooperativa entre los socios para participar directamente en el negocio comprando a los productores. Se estima que para el comienzo de la década de 1920 existían más de 4.000 carbonerías en la Ciudad de Buenos Aires. En este contexto, el 1 de septiembre de 1921 se forma la “Sociedad Protectora de Carboneros Minoristas del Oeste”, cuya sede estaba ubicada en José Martí 657, en el barrio de Floresta.
El 1 de julio de 1925 se emite el primer número de la revista mensual informativa de la Sociedad, que contiene el balance mensual, las deliberaciones de la comisión directiva, noticias de interés para los socios, cronogramas de reuniones y fiestas, avisos comerciales de socios y proveedores, y las direcciones de médicos, farmacias y asesoría jurídica.
Luego, el 16 de agosto de 1928, el Ministerio de Justicia e Instrucción Pública concede la personería jurídica a la Sociedad Cosmopolita Carboneros Unidos, firmada por el presidente de la Nación, Marcelo Torcuato de Alvear2 . Asimismo, en esa fecha, también se cambia la denominación de Sociedad a Asociación, y para ese momento, la Sociedad contaba con aproximadamente 300 socios. En 1935 se realiza la compra de la sede ubicada en la calle Venezuela 2931 / 37 / 39 / 45, efectuándose la escritura finalmente el 30 de diciembre de 1937.
“Para la segunda mitad de la década de 1950, el reemplazo del carbón por la combinación de gas y petróleo provocó una lenta disminución en el volumen de negocio de las carbonerías, iniciando un proceso significativo de cierres o reconversiones hacia la distribución y venta de petróleo. Esta situación llevó a una transformación progresiva de la Asociación, orientándose más hacia aspectos culturales y fortaleciendo sus vínculos con otras instituciones ligures e italianas en Buenos Aires y en Argentina, así como con la Regione Liguria”, repasa la reseña del proyecto.
Con este nuevo rumbo institucional, a principios de los años ’80 fue “Cofundadora” de FEDELI (Federación de Asociaciones Ligures de Argentina); en 1988, asociados empezaron a participar de los cursos de verano de la Universitá di Genova en Santa Margherita Ligure (Centro Internazionale di Studi Italiani); para los 90 aniversarios su Consejo Directivo instaló una placa a modo de celebración, cuya inscripción afianzaba la historia con la frase “cuyos socios activos desde su fundación el 10 de marzo 1901 fueron y siguen siendo genoveses”.
Así, finalmente en 1997 este camino se plasmó en documentos, cuando se modificó el estatuto, cambiando su denominación a “Asociación Genovesa Argentina Carboneros Unidos” (AGACU), abandonando así el término “Cosmopolita”. Este cambio reflejaba la realidad de los orígenes y la identidad cultural que la asociación había tenido desde sus inicios, formalizándolo ahora ante el Registro Nacional de Mutualidades bajo la matrícula CF 62 del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES).
“En la actualidad, los descendientes de los fundadores tienen como objetivo fundamental la investigación histórica y genealógica del aporte realizado por los “Carboneros” en particular, y por los “Genoveses/Ligures” en general, a la historia y presente de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Además, apuestan por las redes sociales como un medio eficaz para su difusión. La asociación se pone a disposición del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y de la “Regione Liguria” para servir como herramienta de colaboración entre ambos, testimoniando así la hermandad entre italianos y argentinos, entre porteños y genoveses”, destacan los legisladores.
“La AGACU representa una muestra de la evolución de la Ciudad de Buenos Aires, de su conformación cosmopolita y asociativista, de la búsqueda del crecimiento personal a través de la colaboración grupal (gremial y cooperativa) y asistencia social (mutual). Se ocupa de desarrollar actividades deportivas, difundiendo todo material a través de una revista y, como corolario, se ocupa del mantenimiento y difusión de aspectos culturales de Génova e Italia en Buenos Aires y Argentina, y viceversa” resaltan.
se pueden mencionar las siguientes actividades que se llevan a cabo: ● digitalización, recuperación y conservación de material documental (papel y fílmico); ● investigaciones genealógicas que conecten a la Liguria con personalidades históricas argentinas (Manuel Belgrano, Julieta Lanteri, etc); ● documentar el origen genovés de los dos principales clubes de fútbol de la Argentina (Club Atlético Boca Juniors y Club Atlético River Plate); ● divulgar el origen genovés del barrio de La Boca y de sus Bomberos Voluntarios; ● mantener y profundizar lazos con las Asociaciones Ligures del resto de la CABA (Asociación Ligure de La Boca, Asociación Genovesa Madonna della Guardia, Bomberos Voluntarios de La Boca, Club Atlético Boca Juniors, El Trapito, Museo Histórico de La Boca, “República de La Boca”), del país (Asociación Ligure de Tucumán, Centro Ligure de Paraná, Círculo Ligure de la Plata Cristoforo Colombo, Laboratorio D’italiano Fiori de Viedma) y de la Liguria (Associazione Liguri nel Mondo); ● articular un Convenio de Colaboración con la Fundación para la Literatura Rioplatense Bartolomé Hidalgo para intercambiar información y material que permita el fortalecimiento institucional; ● divulgar la reedición de un libro histórico “Cuxinea Zeneize” (Pietro Sorba y Luca Sessarego); ● recibir a delegaciones de porta cristos genoveses e hinchas de los dos principales clubes (Genoa y Sampdoria); ● recibir a ex jugadores de fútbol (Omar Larrosa) o periodistas (María González Rouco); ● custodiar donaciones de libros, documentos y fotos que van acercando a la institución; ● seguir el viaje del Amerigo Vespucci – “La nave piú bella del mondo” y encontrar los homónimos de la Boca; ● buscar al menos una efeméride por cada día del año que conecten a la Liguria y la Argentina; ● divulgar a artistas genoveses, como el cantautor Fabrizio De André o el escritor Eugenio Montale (Premio Nobel en Literatura); ● realizar entrevistas para medios como IlGlobo; ● participar de la conferencia “La Emigración y el deporte, una historia fascinante” organizada por el MEI – Museo Nazionale Emigrazione Italiana en la ciudad de Génova.
J.C.