El Gobierno porteño y la Comuna 5 convirtieron la cortada de Sánchez de Bustamante y la vía en un nuevo espacio verde, un complemento a la curva de Díaz Vélez y el Parque de la Estación. Vecinos de San Cristóbal inician una campaña para que un espacio público lleve el nombre de Jorge Larroca, cuidando e historiador de ese territorio.
Luego de haber iniciado las obras en abril de este año, la Comuna 5 de Buenos Aires (Almagro y Boedo) concluyó una puesta en valor de la calle Sánchez de Bustamante, entre Bartolomé Mitre y las vías del tren Sarmiento.
El proceso consistió en remover una parte de la superficie con adoquines para instalar áreas parquizadas. Además, se impidió el estacionamiento de autos.
“Una nueva peatonal se suma a la Comuna 5”, introdujeron fuentes oficiales y sumaron: “Las tareas de puesta en valor consistieron en la incorporación de árboles y plantaciones vegetales, y cestos para mantener el área limpia. Además, se crearon caminos y sectores de encuentro con bancos y mesas para la permanencia y el disfrute de los vecinos”.
Vale recordar que en abril vecinos integrantes de Proteger Abasto, Patrimonio Almagro-Boedo y del Parque de la Estación hablaron con los responsables de la obra ante la remoción de los adoquines.
En ese entonces indicaban: “Esta cuadra es parte del proyecto completo del Parque de la Estación al que aún le falta concretar lo que la ley indica sobre la calle Mitre por eso pedimos que se hiciera de manera”.
En 2021, en el marco del programa Abasto Barrio Cultural del Ministerio de Cultura porteño se realizaron encuentros con vecinos e instituciones para mapear fortalezas y debilidades del espacio público en la zona.
En esos encuentros, muchos de ellos desarrollados en el Galpón Ferroviario del Parque de la Estación, se mencionó la idea de intervenir este sector de Bustamante.
En esos mismos mapeos empezó a aflorar la idea de lo que luego fue el llamado Biocorredor Cultural Agüero, entre Perón (Parque de la Estación) y Zelaya. Este año se inauguró la intervención que incluyó nuevos canteros en una vereda más ancha, un poema lumínico en forma de guirnalda fijada en los postes aéreos escrito por Fernando Noy, la “alfombra de arte” más grande de la ciudad (ilustraciones sobre el pavimento), murales en negocios y otras instalaciones públicas.
El objetivo de este trabajo es contribuir a un mejor espacio público, fomentar que la gente camine sin miedo y que pueda atravesar las distintas calles del Abasto, vinculando sus espacios culturales y negocios.
En ese proceso también surgió la idea de Calle Verde Guardia Vieja, entre Agüero y Gallo. Allí se ensanchó la vereda, se redujo un carril de circulación vehicular y se colocó nueva luminaria.
La obra en Sánchez de Bustamante complementa con el predio del Parque de la Estación, que, como se informó, continúa en obra para reformar distintos sectores como el anfiteatro y las áreas parquizadas, y también con la curva de Díaz Vélez, entre Bulnes y Bustamante.
Por pedido de los vecinos, el Gobierno porteño y la Comuna 5 mejoraron las áreas verdes de Díaz Vélez e incluso instalaron bancos públicos. La idea es que el verde esté dentro del Parque de la Estación y también en sus alrededores.
Homenaje a Jorge Larroca
Al cierre de esta edición, la Junta de Estudios Históricos de San Cristóbal “Jorge Larroca” iba a celebrar un encuentro con vecinos para celebrar el aniversario del natalicio de Larroca, historiador y periodista.
Durante dicha reunión se iba a poner de manifiesto la voluntad de pedir a las autoridades que un espacio público del barrio lleve su nombre, en honor a su labor en vida como investigador y difusor de la historia local.
Jorge Larroca nació en Buenos Aires el 31 de agosto de 1930. Fue periodista y escritor. A comienzos de la década del sesenta se mudó a San Cristóbal con su esposa, Alicia Baudrix. Vivieron en Constitución y Combate de los Pozos.
Allí se interesó por la historia del barrio, para luego publicar el libro “San Cristóbal el barrio olvidado”, un hito de la historia de los barrios porteños.
Tras su muerte, familiares y vecinos fundaron la Junta de Estudios Históricos de San Cristóbal y le pusieron su nombre.
Sigue la lucha contra el Código Urbanístico
En julio de este año diversas asambleas vecinales crearon la Interbarrial Buenos Aires (IBBA) con el objetivo común de rechazar el actual Código Urbanístico y pedir que la Legislatura porteña apruebe cambios propuestos por estos mismos ciudadanos, mediante proyectos de Ley que presentaron en distintas oportunidades, pero que hasta el momento han sido cajoneados.
Al cierre de esta edición, iban a realizar una protesta frente al palacio legislativo de Perú 160 el primer miércoles de septiembre, por la tarde.
“Este Código y sus excepciones están destruyendo la calidad de vida de vecinas y vecinos y la fisonomía de la ciudad, al tiempo que fomentan: El aumento exponencial del volumen constructivo, las alturas y el avance sobre los pulmones de manzana, las líneas de frente y de retiro. El estallido de la explotación comercial, la saturación de usos del suelo y los servicios. El avance sobre los espacios verdes y la pérdida del arbolado urbano”, expuso la IBBA en un comunicado.
“La destrucción del patrimonio histórico y arquitectónico de los barrios. Las organizaciones vecinales de más de 20 barrios de la Ciudad de Buenos Aires nos declaramos en estado de emergencia urbanística ambiental y exigimos la suspensión inmediata del otorgamiento de Permisos de Demolición y de Obra nueva que superen 9m de altura e invadan el pulmón de manzana y de Certificados urbanísticos, hasta que se promulguen las modificaciones al código vigente propuestas mediante proyectos legislativos, a fin de evitar que continúen las situaciones irreversibles enunciadas. ¡Invitamos a sumarse a vecinas, vecinos y organizaciones de todos los barrios porteños!”, agregaron.
Juan Manuel Castro