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El aire del Abasto y Balvanera tiene más contaminación que lo recomendado por la OMS

Greenpeace Argentina midió el aire alrededor de varias escuelas.

A principio de mes, Greenpeace Argentina divulgó los resultados de un estudio sobre la calidad de aire en la Ciudad de Buenos Aires. Midió 20 esquinas porteñas y determinó que una de las más contaminadas era la zona de Balvanera. En particular, en las cercanías de la esquina de Pueyrredón y Sarmiento.

Según el estudio, en esta zona de Once hay más dióxido de nitrógeno (NO2) y Material Particulado 2.5 (PM2.5). Se trata de dos componentes tóxicos presentes en la polución del aire, producto en su mayoría de las emisiones del caño de escape de colectivos y camiones.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece el límite de exposición crónica a PM2.5 de 10 ‎µm/m3 promedio anual. Greenpeace Argentina registró un promedio de PM2.5 de 35.6 ‎µm/m3 en Balvanera.

En el estudio se midió la calidad de aire alrededor de estas escuelas, en promedio:

 

Escuela Primaria N°24 “Catamarca” – Jean Jaurés 870:

PM2.5 de 15.88 ‎µm/m3; NO2 de 30.21.

 

Escuela Primaria N°10 “Pte.Quintana” – Lavalle 2366:

PM2.5 de 12.68 ‎µm/m3; NO2 de 30.72.

Jardín Integral Nucleado B – Sarmiento 2250:

PM2.5 de 26.03 µm/m3; NO2 de 41.55.

 

Escuela Primaria N° 16 “Pte.Mitre” – Sarmiento 2832:

PM2.5 de 35.61 µm/m3; NO2 de 31.5.

 

Jardín Maternal N°6 – Perón 2941:

PM2.5 de 16.54 µm/m3; NO2 de 28.93.

 

Jardín Integral Nucleado B “Francisco Reyes” – Gral. Urquiza 227:

PM2.5 de 12.92 µm/m3; NO2 de 31.50.

 

Escuela Normal Superior “D.F.Sarmiento” – Callao 450:

PM2.5 de 12.86 ‎µm/m3; NO2 de 42.63.

 

Para Ingo Boltz, coordinador de la campaña de contaminación de aire de Greenpeace, dijo: “Es preocupante la exposición que reciben quienes transitan estas zonas cotidianamente: el 31% de todas las mediciones de NO2 violan los límites de la OMS y peor aún sucede con el caso del PM2.5, materia que podemos considerar venenosa por sus graves efectos a la salud y que en el 72% de las mediciones superó los límites”.

Del mismo modo Boltz recalcó: “Mientras el transporte público dependa de la quema de combustibles como el gasoil, respirar en la ciudad es una amenaza para todos. Las cifras de la OMS indican que 7 millones de personas mueren anualmente en el mundo por la contaminación de aire.  Los últimos resultados de nuestro estudio son alarmantes y creemos que son indicadores para que el gobierno se ponga del lado de la salud de las personas, por eso desde Greenpeace reclamamos aire limpio ya”.

Entre los efectos dañinos para la salud por inhalación continua de PM2.5 se encuentran las enfermedades respiratorias como el asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), cáncer, enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares (ACV).

J.C.

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