El Club Atlético Fernández Fierro, ubicado en la calle Sánchez de Bustamante 772 en la zona del Abasto, cumplió 20 años de existencia este 1 de mayo. El galpón que alojó un taller mecánico se convirtió en una sala de conciertos con capacidad para más de 200 personas, en una “trinchera cultural” con el tango en primer plano, según expresó Walter “El Tano” Cocaro, programador del CAFF.
“Nosotros estamos empapando de cultura y tango hace años al barrio, a la ciudad, al país”, agregó el referente del espacio ubicado en el corazón del Abasto que todas las semanas ofrece una programación con eventos musicales y convoca a artistas de distintas generaciones.
Para celebrar, el 1 de mayo, durante el Día del Trabajador, se vivió una noche memorable con un show en vivo de la Orquesta Típica Fernández Fierro, grupo del cual nació el CAFF. Se sumaron artistas invitados como Sofía Viola, Dema, Pablo Bernaba, Dúo Seren-Huillier, Dúo Castiello-Sensottera, Juan Pablo Fernández, Juan Pablo Gambarini, Dúo Pedretti-Bergesio, Ariel Prat, Álex Musatov y Ezequiel Jusid de Arbolito.

“Encontramos un lugar propio”
El CAFF del Abasto es fruto del trabajo de la Orquesta Típica Fernández Fierro, fundada en 2001. Es considerada una de las agrupaciones clave en el nacimiento del tango contemporáneo. Inspirados en grandes maestros del género como Osvaldo Pugliese, también cuentan con el ímpetu de una banda de rock y la cultura de la autogestión.
Por ese entonces, eran 12 jóvenes estudiantes de la Escuela de Música Popular de Avellaneda que tocaban en las calles del barrio de San Telmo. Llevaban a cuestas un piano con rueditas y tocaban para el público que paseaba por el casco histórico porteño.
A pesar de las prohibiciones para tocar en la vía pública, el grupo empezó a hacerse popular. Se corrió la bola y creció el interés por escuchar a la Fernández Fierro.
“Los artistas tocábamos en San Telmo. Éramos una orquesta típica de tango, muchos músicos. En general, los lugares eran chicos para un grupo así. O tenían problemas con la técnica o no te servían ni un vaso de agua. Por eso, decidimos buscar un lugar propio y en el Abasto lo encontramos”, repasa Walter.

Bajo el signo de Pugliese
La Fernández Fierro se nutrió de la música del histórico pianista Osvaldo Pugliese y también de su forma de trabajar. Por eso, el CAFF funciona como una cooperativa “concebida por músicos para músicos”, indican referentes del Club Atlético del Abasto.
Así, este espacio cultural brinda empleo a músicos, técnicos, prensa, camareras y barman. A la vez, la barra es manejada íntegramente por la cooperativa. Implica el sustento para unas 25 familias.
“Nos organizamos como una cooperativa, tomando el legado del maestro Pugliese. Hicimos la misma metodología que él tenía con sus músicos”, agrega Walter.

Un espacio para distintas voces y experiencias
El Club Atlético del Abasto se consolidó como un espacio para seguir de cerca la escena del tango contemporáneo. Los grupos y solistas presentan sus discos y además es sede de distintos eventos, como el Festival Porteño de Fado y Tango, organizado por la cantante y gestora cultural Karina Beorlegui.
Entre distintos hitos culturales, en la sala del Abasto desde 2017 se celebra el Festival Familia del Club Atlético Fernández Fierro (FACAFF). El año pasado se realizó la quinta edición, que se extendió durante 18 noches de música en vivo.
Además, el espacio musical de Bustamante cuenta con su propia radio online. Desde 2010, Radio CAFF transmite música ligada al registro actual del tango: “Artistas contemporáneos, más algunas rarezas y también algunos tangos de otros tiempos. Contenidos cuidadosamente seleccionados irrumpen durante toda la programación”.

El CAFF, sitio de Interés Cultural
En septiembre del año pasado, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires declaró al Club Atlético Fernández Fierro del Abasto como Sitio de Interés Social y Cultural de la CABA al aprobar un proyecto del legislador Juan Manuel Valdés.
“Desde su inauguración hasta nuestros días, el CAFF se ha consolidado en un lugar emblemático para la cultura porteña”, dice la defensa del texto parlamentario.
“Cabe agregar que la Orquesta Típica Fernández Fierro, en estos últimos años supo revolucionar el tango con su sonoridad y puesta en escena. Su proyecto colectivo conformado por una radio online (RadioCAFF), sus discos independientes y el CAFF los han convertido en un emblema de la escena musical independiente. Con una vasta y exitosa trayectoria discográfica, fueron aclamados tanto en Argentina como en el extranjero, llevando su música a escenarios históricamente asociados al rock. Además, fueron galardonados con el Premio Gardel al Mejor Álbum Orquestal”, agrega la fundamentación del texto aprobado.
El 8 de noviembre de 2023 se realizó la colocación de la placa de mármol a nombre de la Legislatura para homenajear al CAFF. Estuvieron presentes miembros de la cooperativa y tocó en vivo la Orquesta Típica Fernández Fierro.

Una mano para los laburantes
“Queremos tener precios populares, pagar sueldos y servicios, sostenernos de forma autogestiva”, asegura Walter, quien se muestra en alerta ante la crisis económica vigente, similar a la que arreciaba en el país a comienzos de este siglo, cuando la Orquesta Típica Fernández Fierro daba sus primeros pasos en las calles de San Telmo.
El programador contó que poco antes del festival aniversario del 1 de mayo estuvieron dos semanas clausurados por lo que él consideró una arbitrariedad de las autoridades locales. “Nos hizo un agujero económico enorme”, lamentó.
“El lugar fue declarado sitio de interés cultural y es una pena que te dejen abandonado. Merecemos condiciones más dignas para trabajar”, asegura.
En su opinión, el mismo Estado debería garantizar y contribuir a que los espacios culturales cuenten con todos los elementos habilitatorios, para evitar situaciones como clausuras que implican pérdidas económicas, perjuicios a los músicos y también “un gran tema de salud por la cantidad de trámites posteriores que demanda”.
“Este es un momento muy difícil, hay recortes por todos lados que afectan a toda la sociedad, desde las jubilaciones, los remedios oncológicos, la salud, la cultura. Como dijimos el día del cumpleaños, este es un lugar de resistencia. Vamos a resistir lo más que podamos”, afirmó.
“Este es un estilo de vida. Es un proyecto de vida, un gran amor, un proyecto que uno lo hace propio, donde uno pone todo de sí, es algo que va más allá de un trabajo”, concluye el programador del CAFF.

J.M.C.

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