La comunidad educativa del Jardín del Hospital Ramos Mejía emitió este lunes un comunicado para dar cuenta de la situación que atravesará el lugar el año que viene. Cero vacantes, reducción de la matrícula y docentes en disponibilidad”, sintetizan.
“En el día de hoy la comunidad de la Escuela Infantil que funciona en el Hospital Ramos Mejía sufrió un nuevo golpe, que se suma al cierre de la sala de bebés de 45 días a un año (Lactario), anunciado en octubre por el Ministerio de Educación de la Ciudad. Esta vez, la comunidad desayunó con la noticia de que el Jardín no ofrecerá ni una sola nueva vacante a las más de 1.600 familias que la solicitaron (1.600 solo en ese Jardín). Esto significa un recorte en la cantidad de alumnos y alumnas que derivará en el pase a disponibilidad de varias maestras”, introdujeron.
“Año a año se liberan nuevas vacantes en las escuelas infantiles debido a que en las salas de edades superiores los cupos son mayores (entran más estudiantes). Por ejemplo, en el Jardín del Hospital Ramos Mejía, en la sala de bebés (Lactario) hay 45 cupos, mientras que en la sala de 1 año hay 55. Esas 13 vacantes de diferencia se ofrecen todos los años a las miles de familias que las solicitan. Lo mismo ocurre en el traspaso de sala de 2 a sala de 3. Sin embargo, por decisión de la Ministra de Educación Soledad Acuña, el Jardín en cuestión no ofrecerá esas vacantes. Es decir, en sala de 1 (y en las siguientes) habrá menos alumnos que este año. Ello por un lado implica el despilfarro de espacios dedicados a la educación, y por el otro el pase a disponibilidad de más docentes”, sumaron.
“En total se pierden 76 vacantes para el 2019. Esta injustificable e inconfesable decisión, se contrapone a la promesa de campaña del Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, de abrir nuevos jardines y solucionar progresivamente el problemas de la falta de vacantes”, concluyeron.
J.C.