Este viernes la comunidad educativa del jardín del Hospital Ramos Mejía hizo un semaforazo en la esquina de Belgrano y Urquiza para pedir que no cierren salas de este establecimiento público.
La cooperadora el jardín se expresó a través del siguiente comunicado: “Expresamos nuestra gran desazón ante la decisión de las autoridades del Ministerio de Educación de la Ciudad del cierre definitivo de la sala Lactario a partir del año próximo, 2019, y de las salas de 1 y 2 años en 2020 y 2021. Más desazón nos trae el ocultamiento de esta información a la supervisión y las autoridades del jardín, que fueron informadas del cierre del lactario dos días antes de que finalice el periodo de Inscripción Online. Lo que hasta la confirmación de la noticia era un “error del sistema”, en realidad se trataba de un plan orquestado desde el Ministerio”.
“Esta insólita decisión de borrar de un plumazo el acceso a la educación para los más pequeños significa lisa y llanamente aniquilar nuestra escuela tal como la conocemos, y un claro perjuicio para muchas familias, sobre todo para los trabajadores del Hospital por la accesibilidad y conexión de su lugar de trabajo al jardín. Además, viola la Constitución de la Ciudad, que obliga al estado a garantizar la educación desde los 45 días. Este emblemático establecimiento, con 30 años de vida, tiene, también docentes con una trayectoria muy larga en la Institución. Debido a esta decisión, 9 de ellas quedarán sin trabajo. Las están echando de sus segundas casas”.
“Lo que nuestros hijos e hijas aprendieron en su paso por el jardín maternal no lo podrían haber aprendido en otro lugar. No permitiremos que comparen el funcionamiento de una escuela con el de un Centro de Primera Infancia, dependencia de Desarrollo Humano y Hábitat, donde el foco no estaría puesto en la educación sino en la contención social. No hay proyectos pedagógicos y los trabajadores se encuentran bajo contratos precarizados. Las familias y docentes se han movilizado para reclamarle directamente al Jefe de Gobierno Sr. Horacio Rodríguez Larreta el día jueves 11/10 en una reunión de vecinos. Él se comprometió a hablar con la ministra Soledad Acuña. Aún no tenemos novedades. La Asociación Cooperadora acompañará a las familias y docentes de la comunidad para que las Autoridades habiliten un período de inscripción extraordinaria para Lactario 2019 en la Escuela y, entre todos podamos frenar esta decisión incomprensible y carente de justificación alguna”, concluyeron.
En tanto, las legisladoras Lorena Pokoik y Paula Penacca (Unidad Ciudadana) presentaron un pedido de informes sobre la situación del jardín. “Mientras, se hizo una obra que refaccionó los techos del primer y segundo piso, trabajos de pintura y acondicionamiento de la instalación eléctrica. El 14 de septiembre, según nos informa la comunidad educativa, se habrían terminado las obras, pero aún no se dispuso que los niños de 3 salas trasladadas provisoriamente puedan volver a las mismas. Las familias y los docentes reclaman que las niñas y los niños puedan finalizar el año en sus salitas, especialmente aquellos que egresan”, expresaron.
“Por otro lado, no se ha reparado o sustituido el techo de policarbonato del patio cubierto, que tiene severas filtraciones. Además, en los meses de calor, se corre el riesgo de deshidratación por las insoportables temperaturas que alcanza. La comunidad reclamó a las autoridades, a Infraestructura y a la Defensoría del Pueblo sin respuestas concretas hasta el momento. Por otra parte, no se ofreció ninguna vacante para inscripción en sala Lactario (de 45 días a 1 año), para el ciclo lectivo 2019. De tal modo, las familias no pueden anotar a los bebés en el mismo jardín donde cursan sus hermanitos. Muchas familias nos manifiestan su sentido de pertenencia y amor por este establecimiento del cual se siente excluidos”, sumaron.
J.C.
